
“Bolivia, Bolivia, Bolivia… Siempre Bolivia. ¡Vienen tiempos mejores!”, es el mensaje que tiene en su perfil de X el nuevo presidente electo de Bolivia, Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano, que logró dejar atrás una hegemonía de casi 20 años de izquierda. El nuevo mandatario anunció que su Gobierno tendrá cercanía con el de Donald Trump y que permanecerá en los BRICS.
“Nos unimos con orgullo a los líderes de la región para felicitar al presidente electo, Rodrigo Paz Pereira, por su elección en Bolivia. Esperamos apoyar los esfuerzos de Bolivia para estabilizar su economía, fortalecer sus instituciones y profundizar sus alianzas globales en favor de un hemisferio más seguro, más fuerte y más próspero”. Este fue el claro mensaje que el Departamento de Estado de los Estados Unidos publicó en sus redes.
El presidente electo agradeció el respaldo ofrecido por Estados Unidos a través del vicesecretario de Estado, Christopher Landau, “para poder llevar adelante una relación estrecha con uno de los gobiernos más importantes del ámbito mundial”, señaló.
El economista y senador Rodrigo Paz Pereira, de 58 años, ganador del balotaje presidencial en Bolivia, aseguró que impulsará una “nueva dimensión” en el país del Altiplano, “con unidad, diálogo y esfuerzo compartido”. Resaltó el objetivo de “abrir Bolivia al mundo, retomar un rol que perdimos geopolíticamente y geoeconómicamente en las dos últimas décadas”.
En su discurso, el presidente electo abogó por la unidad nacional y la colaboración de todos los partidos con representación parlamentaria para enfrentar los desafíos económicos, políticos y sociales del país: “Le pido a cada uno de los representantes, hombres y mujeres que están en la Asamblea Legislativa, indistintamente de su organización política, sumémonos, seamos parte, trabajemos juntos para transformar la Patria”, dijo.
Un giro “sorpresivo” de la política boliviana

Luego de 19 años de estar gobernada por el Movimiento Al Socialismo (MAS), que fuera refundado por el líder cocalero Evo Morales, Bolivia no solo de partido sino también de movimiento político en el gobierno. Y si bien las encuestas previas daban una ventaja de casi 10 puntos al candidato oficial, Jorge Tuto Quiroga, la realidad fue al revés.
Los resultados fueron sorprendentes, sobre todo luego de que el MAS quedó al borde de la desaparición legal en las elecciones generales del 17 de agosto, cuando apenas cosechó el 3% de votos: el mínimo indispensable para conservar la personería jurídica. Pero los hechos revelaron que el apoyo fue aumentando los últimos días de una forma insospechada: Paz obtuvo el 54,6% de los votos, relegando a su oponente, Quiroga, con el 45,4%.
Para el analista Álex Contreras, el mensaje es claro: «La población boliviana quiere un cambio, quiere renovación, pero quiere un cambio concertado, un cambio que no solamente beneficie a algunos sectores sociales, sino a la mayoría de la población».
Más allá del balotaje entre Paz y Quiroga, Contreras señala que la izquierda nacional popular de Bolivia fue la gran derrotada este 19 de octubre. Para marzo de 2026 está prevista la realización de elecciones subnacionales, en las cuales se elegirán gobernadores, alcaldes, concejales y otros funcionarios de los niveles departamental y municipal.
«El sector de Evo Morales puede recuperar cierta fuerza orgánica, partidaria, ideológica y política. Pero hay que recordar que Morales tiene un mandamiento de aprehensión. Él ha perdido la fuerza que tenía años antes, porque Evo no es el mismo líder y lamentablemente no existe ninguna renovación en su espacio», dijo.
Durante la campaña, en reiteradas ocasiones el candidato de la Alianza Libre acusó a Paz de mantener acuerdos subrepticios con Morales para beneficiarlo jurídicamente en el futuro a cambio del voto de sus bases. Para el experto, esta versión no tiene sustento y fue parte de «la guerra sucia» desplegada entre los partidos en las últimas semanas.
“Con el fin del Gobierno del MAS se inicia un ciclo político difícil, con una situación económica, social y estructural complicada en Bolivia”, dijo el analista boliviano Álex Contreras. “Lo importante será identificar los desafíos y aplicar ese programa de Gobierno que se nos ha planteado, para beneficio de las mayorías”, señaló.
«Ahora Rodrigo Paz tiene control territorial de gran parte del país. El PDC ha ganado en al menos el 80% de municipios. Dependerá mucho de la gestión que pueda llevar adelante en estos meses, hasta marzo, para saber cómo le irá en las subnacionales», detalló el analista.
Sheinbaum: “La división del MAS fue causa de la derrota”
«Desde la perspectiva de los movimientos progresistas en América Latina, es una pena que se hayan dividido allá en Bolivia», dijo la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, atribuyendo el triunfo de Rodrigo Paz a la división del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS). «Hablando políticamente del ´movimiento de transformación´, es muy importante permanecer en unidad, porque cuando te divides es cuando pierdes fuerza con la gente, con el pueblo«, puntualizó la jefa de Estado.
La mandataria mejicana remarcó que “la unidad es muy importante para el movimiento político”, haciendo referencia su partido, el Morena, que ganó por primera vez la presidencia de México hace siete años, con su antecesor y correligionario Andrés Manuel López Obrador (2018-2025).
¿Ha ganado la centroizquierda?
Según la analista Lily Peñaranda, la revelación de publicaciones tachadas de racistas, atribuidas al candidato oficialista a ocupar la vicepresidencia, Juan Pablo Velasco; y la carismática figura de Edmand Lara, vicepresidente electo del PDC, fueron elementos claves para la victoria de Paz. .
«Los militantes del MAS se han inclinado por el ‘capitán’ Lara (como se conoce popularmente al locuaz excapitán de la Policía boliviana). Aunque no ha sido una transferencia absoluta de votos. Más bien, han canalizado los votos de quienes no se han desencantado todavía con el proyecto masista, es decir, con los bonos, con la forma de llevar adelante la economía, con la atención a sectores más vulnerables», subrayó Peñaranda.
Para la analista, “ha ganado la centroizquierda, que ha prometido acolchonar la caída. Porque lo que se viene ahora es lo más difícil de la crisis: para atenderla va a ser necesario empeorarla. Sí o sí, no hay otra salida, y la gente sabe que las medidas de shock afectan mucho a los más vulnerables. Por ello Paz ha prometido hacer algo al respecto, evitar que la población sufra el impacto”.
Fuente: @sputnik @ansalatina