El emblemático Teatro Municipal Ignacio A. Pane de Asunción será escenario de “Arpalandia”, un homenaje musical sin precedentes al Paraguay, ofrecida por 20 arpistas japoneses, alumnos de la Academia del Arpa en Tokio. La iniciativa se enmarca en las celebraciones de los 100 años de la Guarania y busca estrechar lazos con el país a través de la música, bajo el eslogan “Paraguay y Japón, unidos por un solo corazón”. La presentación será el próximo 13 de agosto.
La Academia del Arpa en Tokio fue fundada por el reconocido arpista paraguayo Enrique Carrera, arpista paraguayo residente en Japón e incansable embajador cultural del país. “Tenemos más de 150 alumnos y con 20 de ellos vamos a visitar Paraguay”, comentó el maestro durante una visita al stand de Paraguay en la Expo Osaka, donde aun retumban los aplausos de su presentación en el marco del Día Nacional del Paraguay, donde deslumbró a más de mil personas.
El repertorio del concierto que se ofrecerá en Paraguay incluirá piezas tradicionales japonesas, paraguayas, y composiciones internacionales, interpretadas por alumnos que ya se destacan como profesionales en Japón. “Ellos están muy contentos porque van a ir a tocar a Paraguay, que ellos conocen como ‘Arpalandia’”, comentó Carrera.
“Los japoneses conocen mucho el arpa paraguaya, ya que es muy parecido al koto, un arpa horizontal de su cultura. El sonido les parece muy nítido y claro, y también les gusta mucho el ñandutí”, aseguró Carrera.
Expo Osaka 2025: vitrina cultural del Paraguay
La Expo Osaka 2025 reúne a más de 150 países como una plataforma global para mostrar lo mejor de cada nación. En este marco, el stand de Paraguay se ha convertido en una de las vitrinas culturales más destacadas del evento. Con una propuesta que combina tradición y modernidad, el pabellón nacional presenta al mundo el arte del arpa paraguaya, el ñandutí, la biodiversidad, la gastronomía y las oportunidades de inversión en el país. La participación paraguaya ha despertado gran interés entre los visitantes japoneses, especialmente por la afinidad cultural que sienten hacia el arpa y los valores de armonía y belleza que comparten ambas culturas.