El Ministerio de Justicia dio un paso clave en la modernización del sistema penitenciario nacional con la implementación del uso obligatorio de uniformes en los nuevos centros penitenciarios de Minga Guazú y “Martín Mendoza” de Emboscada. La medida, establecida mediante la Resolución Ministerial N.º 479, busca fortalecer la seguridad, promover la equidad y dignificar la vida intramuros.
Cada persona privada de libertad (PPL) recibe un kit completo de prendas, diferenciadas por régimen: uniformes amarillos para el régimen convencional y rojos para el régimen cerrado especial, que contempla mayores restricciones y control. La entrega se realiza de forma escalonada y se prevé alcanzar a más de 1.200 internos en ambos establecimientos.
La iniciativa cuenta con el respaldo de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), que proveyó los uniformes en el marco de un plan integral para cubrir a toda la población penitenciaria de los nuevos centros.
Con esta medida, el Gobierno reafirma su compromiso con la construcción de un sistema penitenciario más justo, humano y eficiente.