El miedo vuelve a España con lluvias torrenciales provocadas por una nueva Dana que está atravesando la península, dejando un reguero de inundaciones y zonas evacuadas, especialmente en la provincia de Málaga y en el sur de Tarragona, en la vertiente oriental. El fenómeno Dana amenaza de nuevo a la provincia de Valencia, que ya se encuentra devastada por el tsunami de agua y barro que azotó la zona, hace dos semanas.
La situación fue empeorando durante las últimas horas en España hasta que se decretó la alerta roja por las intensas lluvias que anegaron el centro de Málaga, inundando centros comerciales, viviendas, comercios, patios y garajes. Y no perdonaron al Hospital Clínico, donde la emergencia afectó al laboratorio de análisis y a la planta baja.
Como medida de precaución, decenas de viviendas del barrio de Campanillas fueron evacuadas, después de que por la mañana fueran evacuadas 3.000 personas de zonas cercanas a la ribera del crecido río Guadalhorce. Se cerraron escuelas, universidades y parques públicos y se suspendieron las actividades deportivas.
Renfe, el gestor de infraestructuras ferroviarias, interrumpió las conexiones de alta velocidad Málaga-Madrid a las 13.30 horas. También quedan suspendidas las conexiones de ferrocarril y autobús entre Córdoba y Málaga.
La emergencia meteorológica ha afectado a amplias zonas de la provincia de Málaga, los municipios de Benamargosa y Vélez-Málaga, donde debido a las ininterrumpidas lluvias las autoridades locales han informado de desbordamientos de los cauces locales, con inundaciones de carreteras y viviendas y daños en la red eléctrica. y tuberías de agua. La crecida del río Vélez obligó a bomberos y protección civil a evacuar a más de 1.100 personas de dos campings y un asentamiento gitano en la zona costera de Torre del Mar.
Se han habilitado instalaciones para refugios nocturnos en el polideportivo local y en el colegio Juan Paniagua. La situación también es muy crítica en el sur de Tarragona, donde hay aviso rojo por riesgo extremo relanzado por la Agencia Estatal de Meteorología, por lluvias torrenciales que podrían superar los 180 litros por metro cuadrado en menos de 12 horas. También en este caso las autoridades han suspendido las actividades escolares, cerrado instalaciones deportivas y centros de salud. Las inundaciones provocaron cierres parciales en la autopista AP 7 en dirección Cataluña y colas de kilómetros a pesar de la restricción de circulación únicamente a servicios esenciales.
La situación adversa con la alerta roja por lluvias, incluso torrenciales, se mantendrá vigente al menos hasta la madrugada en Málaga, Granada y el norte de Castellón pero es en la provincia de Valencia donde la gente mira al cielo con angustia. Llueve a cántaros, después de que el ataque de Dana hace dos semanas cubriera con un manto de barro alrededor de setenta municipios y se cobrara al menos 222 vidas. Y donde fueron recuperados los cuerpos de los pequeños Rubén e Izán, de 3 y 5 años, arrastrados por las aguas que invadieron su hogar el pasado 29 de octubre.
El centro de operaciones de emergencias de la Comunitat Valenciana envió un mensaje desde el sistema ‘Es-Alerta’ a las poblaciones de una veintena de municipios, ya afectados por las crecidas del torrente del Poyo y del río Magro, como medida de prevención ante el nuevo temporal. Las escuelas permanecerán cerradas en los municipios donde apenas se han reanudado las clases, y en 20 municipios la circulación seguirá limitada únicamente a los servicios esenciales. En Aldaia, Paiporta, Picania, zona cero de la catástrofe pasada se levantaron barricadas con sacos de arena en las orillas inferiores de los arroyos, con la ayuda del ejército, para intentar frenar las inundaciones que traería esta nueva Dana.
¿Qué es Dana?
Dana es el acrónimo de “Depresión Aislada en Niveles Altos”. Una DANA es un sistema de baja presión o depresión en los niveles altos de la atmósfera, que se ha separado totalmente de la circulación general de la atmósfera. Estas situaciones son potencialmente peligrosas sobre todo a finales del verano y el otoño en la zona mediterránea, cuando la temperatura superficial del agua del mar es elevada, lo que favorece mayores desarrollos nubosos, lo que da lugar a lluvias más fuertes que en ocasiones provocan inundaciones.
Fuente: @ansa.it