La Administración Nacional de Electricidad realizó el mantenimiento integral preventivo de 334 líneas de distribución de media tensión, para mitigar los riesgos de posibles fallas e interrupciones. De esta manera, se logró fortalecer el servicio eléctrico, garantizando la continuidad y calidad del servicio eléctrico para miles de familias en la temporada alta, cuando las altas temperaturas del verano impulsan a un mayor usufructo de energía.
“¡Meta superada!”, publica la Ande en sus redes sociales. Hoy los usuarios de media tensión, correspondiente a 23 kV, pueden confiar en un verano con suministro eléctrico, más allá de lo que indique el termómetro. A través de la implementación del Sistema Integral de Mantenimiento, con datos previamente relevados, 100 % georeferenciados, sistematizado y planificado para su ejecución, se logró completar el mantenimiento preventivo integral.
Para este año, la meta era completar el trabajo en las 333 líneas identificadas, pero se logró intervenir 334, sobrepasando el objetivo inicial. Esto significó un avance del 100,3% en obras de mantenimiento, beneficiando a un total de 835.000 usuarios.
Las tareas se realizaron sin necesidad de interrupciones en el suministro a los usuarios en el Área Metropolitana, ya que se ejecutaron con tensión, en líneas vivas. Con estas intervenciones, se logró optimizar la seguridad de las redes y mejorar la capacidad de respuesta ante eventos climáticos adversos.
