“Dale color a tus días consumiendo frutas y verduras”. Con esta sugerencia, el Ministerio de Salud insta a aprovechar los alimentos naturales de estación para asegurar la provisión suficiente de vitaminas, fibras y agua en el organismo. Destaca a la sandía como una fruta perfecta para mantenerse hidratado y refrescarse, en el marco de la promoción de hábitos saludables para disfrutar del verano.
Para disminuir el riesgo de enfermedades crónicas, el Ministerio de Salud recuerda que es importante aumentar el consumo de frutas y verduras de estación y mantener buena hidratación corporal, bebiendo dos litros de agua por día, además de realizar actividad física de al menos 30 minutos, tres veces por semana.
En este marco, profesionales del Ministerio de Salud recuerdan las importantes propiedades de la fruta típica de esta estación, que sacia. La sandía contiene aproximadamente 93% de agua y aporta vitaminas y minerales. Es una fuente importante de licopeno –contiene 1,5 veces más que los tomates-, un poderoso antioxidante que le da su color rojo y que supera en cantidad a muchas otras frutas frescas como el tomate, protegiendo contra enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.
La sandía aporta muy pocas calorías, tiene propiedades depurativas, y reduce la tensión arterial en pacientes con hipertensión, gracias a su elevado contenido de citrulina, un aminoácido que se encuentra principalmente en la parte blanca que rodea la pulpa. Sin embargo, se sugiere una ingesta diaria moderada para evitar picos de azúcar, de aproximadamente 150 gramos.
Otra fruta estrella del verano es el mango. Su ingesta diaria puede ayudar a prevenir cáncer de seno, de la sangre (leucemia), de próstata y de colon. Combate la sequedad ocular, tiene acción beneficiosa en la piel, la vista, el cabello, las mucosas, los huesos y el sistema inmunológico, por su contenido en vitamina C y A.
Además, ayuda a la absorción del hierro, a la formación de glóbulos rojos, colágeno, dientes y huesos, y es rico en fibra, por lo que ayuda a reducir el colesterol malo en la sangre (LDL). También ayuda a restringir las actividades de una hormona llamada leptina, lo que ayuda a mantener un peso corporal saludable a largo plazo.
