En el marco del Día Mundial de la Psoriasis, especialistas hicieron un llamado a la comprensión y la empatía hacia esta enfermedad autoinmune, inflamatoria y crónica que afecta al 2% de la población mundial. Está relacionada con comorbilidades frecuentes como cardiopatías, diabetes, obesidad, ansiedad y otras, creando un efecto dominó donde una afección empeora a otra.
La psoriasis se manifiesta principalmente a través de lesiones rojas y escamas blancas en la piel, pero su impacto va mucho más allá de lo visible: puede afectar las articulaciones (artritis psoriásica) y tener un profundo impacto emocional y social. Aunque no existe una causa conocida, los especialistas reconocen una combinación de factores genéticos, inmunológicos y ambientales. El estrés, las infecciones, el consumo de alcohol, el tabaco y ciertos medicamentos pueden desencadenar o agravar los brotes en personas.
“La psoriasis no es contagiosa. Es una enfermedad cada vez más frecuente donde el sistema inmunológico provoca una inflamación crónica en la piel y otras partes del cuerpo. Hoy en día existen tratamientos capaces de controlar la enfermedad e incluso lograr la remisión cutánea y articular prolongada. Es importante un diagnóstico temprano y la detección oportuna de comorbilidades para afianzar el tratamiento y mejorar la salud a largo plazo”, explicó la Dra. María Paz Fabio, dermatóloga especialista en enfermedades autoinmunes y Vicepresidenta de la SOPARDER.
Durante años, las opciones terapéuticas se limitaron a cremas con corticoides o medicamentos sistémicos. Sin embargo, la llegada de los tratamientos biológicos, medicaciones más certeras en casos graves, marcó un antes y un después en el manejo de la psoriasis. Estos medicamentos actúan directamente sobre el sistema inmunológico y la inflamación, permitiendo resultados más óptimos, duraderos y seguros.
“Los biológicos nos permiten tratar la causa y no solo los síntomas. Gracias a ellos, muchos pacientes logran la remisión total de las lesiones cutáneas y dolores articulares, con una notable mejora en su calidad de vida”, señaló la Dra. María Paz.
Seguir el tratamiento adecuado y mantener un acompañamiento constante con especialistas es fundamental para controlar la psoriasis y prevenir complicaciones. Cada paciente presenta una evolución distinta, por lo que el seguimiento médico permite ajustar las terapias, detectar brotes tempranos y evaluar la eficacia de los tratamientos.
“El control periódico es clave, así como el apoyo que los dermatólogos brindan a sus pacientes, ya que la psoriasis requiere un manejo integral que combine tratamiento médico, hábitos saludables y soporte emocional. Cuando el paciente se siente acompañado, los resultados son más duraderos y la calidad de vida mejora notablemente, dejándonos una enorme satisfacción como médicos”, finalizó la doctora.
Nace APPEAP: una red de apoyo y esperanza
Este mes se conformó oficialmente la Asociación de Pacientes con Psoriasis y Enfermedades Autoinmunes de la piel (APPEAP), un espacio creado por y para los pacientes, con el objetivo de promover la educación, el acceso al tratamiento y la eliminación del estigma asociado a estas condiciones.
“APPEAP surge de la necesidad de unir voces, acompañar a quienes recién reciben el diagnóstico y trabajar junto a profesionales y autoridades para garantizar un tratamiento digno y oportuno”, destacó Hugo Bellassai, Presidente de la Asociación.
Las personas interesadas pueden sumarse a la comunidad en las redes sociales @appeap.py y en el sitio web www.appeap.com.