
El saludo de los líderes mundiales al nuevo pontífice de la Iglesia Católica, León XIV, deja traslucir las expectativas hacia el nuevo liderazgo de Roma en el conflictivo escenario internacional. Desde Putin a Netanyahu, el mensaje parece ser “impulsar el diálogo”. Zelensky, por su parte, le pide: «Apóyenos».
“Recibimos con inmensa alegría la noticia de la elección del nuevo Sumo Pontífice de la Iglesia Católica: el Papa León XIV. Que su guía traiga esperanza, diálogo y unidad en un momento que necesitamos más que nunca de los valores cristianos para construir un mundo más humano”, dijo el presidente del Paraguay, Santiago Peña.
Desde Ucrania hasta Israel, desde la Unión Europea hasta América Latina, un coro de felicitaciones lleno de confianza y apertura al diálogo unió a los líderes mundiales frente al nuevo Papa. En un período devastado por guerras y divisiones, marcado por tensiones y nacionalismos en los cuatro rincones del planeta, la elección de León XIV trae para algunos nuevos aires de esperanza.
Muchas personas en las redes sociales se refieren sobre todo a la palabra más pronunciada por Robert Francis Prevost en su discurso: “paz”. En nombre de esa palabra, está la esperanza que llega desde los cinco continentes de que el mundo pueda tener las herramientas para pasar la página de un presente oscuro. No es casualidad, quizá, que entre los primeros en dar la bienvenida al nuevo pontífice se encontraran dos líderes que están en guerra desde hace más de tres años: Volodymyr Zelensky y Vladimir Putin.
Desde Ucrania, el presidente Zelensky tiene palabras de agradecimiento para el nuevo Papa, a quien desea “sabiduría, inspiración y fuerza, tanto espiritual como física, en el cumplimiento de su noble misión. ¡Ad multos annos!”, señalando en latín su deseo de un reinado duradero. “Esperamos el continuo apoyo moral y espiritual del Vaticano a los esfuerzos de Ucrania por alcanzar una paz duradera”, tuiteó el presidente ucraniano.
Por otro lado, desde Rusia, Putín expresó: “Estoy seguro de que el diálogo constructivo y la interacción establecidos entre Rusia y el Vaticano seguirán desarrollándose sobre la base de los valores cristianos que nos unen».
La guerra en Ucrania será sin duda uno de los asuntos más delicados que León XIV tendrá que abordar en las próximas horas. Su reiterado y sentido llamamiento a una paz y al desarme y podría ser utilizado de algún modo por aquellos que en Europase han opuesto durante meses a la estrategia armamentista de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

El gobierno húngaro, gran enemigo interno de la Unión Europea para apoyar a Kiev, destacó la palabra «paz» al saludar a un pontífice, al que el presidente de la nación, Viktor Orban llamó «una nueva esperanza».
En el Oriente Medio es ante todo el presidente israelí quien habla. «Esperamos mejorar las relaciones entre Israel y la Santa Sede y fortalecer la amistad entre judíos y cristianos en Tierra Santa y en todo el mundo», es el mensaje del presidente Isaac Herzog, mientras que el primer ministro Benjamin Netanyahu simplemente le desea éxito al «primer Papa de los Estados Unidos».
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de los Emiratos Árabes Unidos, el jeque Abdullah Bin Zayed Al Nahyan, señaló que el nuevo Papa «promueve el diálogo entre las diferentes religiones y la coexistencia entre personas de diferentes credos», en clara referencia a la guerra en Gaza, en el Medio Oriente.
El mensaje de diálogo de los líderes de la Unión Europea fue inmediato en el Viejo Continente. “La UE está dispuesta a colaborar estrechamente con la Santa Sede para abordar los desafíos globales y fomentar un espíritu de solidaridad, respeto y amabilidad”, afirmaron Ursula von der Leyen y Antonio Costa en una declaración conjunta.
Por su parte, la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, deseó que «el liderazgo de León XIV sea un faro de esperanza para todos». Mientras tanto, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, con ocasión del 80º aniversario del fin de la primera guerra mundial, dedicó al nuevo Papa este mensaje: “Que este 8 de mayo este nuevo pontificad
o sea portador de paz y de esperanza”.
Fuertes expectativas en América Latina
La estrecha relación de León XIV con América Latina ha entusiasmado –misionero durante mucho tiempo y luego obispo en Perú– . Empezando por la presidenta Dina Boluarte, quien desde Lima habló de una “elección histórica” recordando los vínculos del nuevo Pontífice con el país andino: “Sembró esperanza, caminó junto a los más necesitados y compartió las alegrías de nuestro pueblo”, dijo.
“Las fuerzas del cielo han dado claramente su veredicto”, escribió el presidente argentino Javier Milei. Mientras tanto, desde Bogotá, llegaba uno de los primeros comentarios “políticos” sobre el Papa, norteamericano como Donald Trump, pero con ancestros sudamericanos, españoles y franceses. «Espero que sea el gran líder de los pueblos migrantes del mundo y que apoye a nuestros hermanos migrantes latinoamericanos, hoy humillados en Estados Unidos», enfatizó el presidente colombiano, Gustavo Petro.

Desde Brasil, el Presidente Luiz Inácio Lula da Silva expresó su deseo de que el Papa León XIV «retome el legado» de su predecesor Francisco, lo que se ve difícil en el ámbito doctrinal. “Las principales cualidades de Francisco fueron la búsqueda incansable de la paz y la justicia social, la defensa del medio ambiente, el diálogo con todos los pueblos y religiones y el respeto a la diversidad”, señaló Lula.
La tensión con Estados Unidos
La tensión que mantiene hoy el continente europeo con Estados Unidos parece reflejarse en el perfil del nuevo papa, a tal punto que algunos creen que fue elegido justamente para enfrentar la autoridad de Trump, ya que venía criticando la política migratoria de Norteamérica en mensajes dirigidos a sus autoridades.
Sin embargo, desde Estados Unidos, el mensaje del presidente Donald Trump fue festivo: “Es un gran honor y una gran emoción para nuestro país”, dijo, añadiendo que está deseando reunirse con el nuevo papa.
El secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, afirmó: “este es un momento profundamente significativo para la Iglesia católica, que da nueva esperanza y continuidad a más de mil millones de fieles. Estados Unidos, está dispuesto a profundizar nuestra relación con la Santa Sede y con el primer Pontífice de América”, señaló Rubio. Todo parece indicar que el escenario internacional podría cambiar bajo el nuevo liderazgo de Roma.
Fuente: @ansa.it @vaticannews