“A las 7:35 de esta mañana regresó a la casa del Padre”. Con estas palabras, el cardenal Kevin Joseph Farrell, anunciaba hoy el fallecimiento del Papa Francisco. Los mandatarios de todo el mundo le rinden sentidos homenajes en las redes sociales. “Su vida fue un testimonio de fe, humildad y amor al prójimo. Nos deja un legado de servicio y compromiso con los más vulnerables, valores que seguirán guiándonos”, expresó el presidente de la República, Santiago Peña.
“Toda su vida estuvo dedicada al servicio del Señor y de su Iglesia. Nos enseñó a vivir los valores del Evangelio con fidelidad, valentía y amor universal, especialmente en favor de los más pobres y marginados”, añadió el cardenal Farrell, en un breve comunicado titulado: “El Papa Francisco ha partido a la Casa del Padre”.
“La muerte del Papa Francisco provoca dolor y conmoción en todo el mundo. Su enseñanza ha recordado el mensaje evangélico, la solidaridad entre los hombres, el deber de cercanía con los más débiles, la cooperación internacional y la paz en la humanidad”, señaló el presidente de la República de Italia, Sergio Mattarella. Por su parte, la presidenta del Consejo, Giorgia Meloni, expresó que Francisco “será recordado como el Papa del pueblo”.
En Argentina, el presidente Javier Milei publicó hoy sobre Francisco: “A pesar de diferencias que hoy resultan menores, haber podido conocerlo en su bondad y sabiduría fue un verdadero honor para mí. Como Presidente, como argentino y, fundamentalmente, como un hombre de Fe, despido al Santo Padre y acompaño a todos los que hoy nos encontramos con esta triste noticia”, escribió el mandatario.
Y en Estados Unidos, la Casa Blanca le rindió un homenaje gráfico con fotos de visitas oficiales, y una frase contundente: “Descansa en paz, Papa Francisco” (Rest in Peace, Pope Francis).
“Desde Buenos Aires hasta Roma, el Papa Francisco quiso que la Iglesia llevara alegría y esperanza a los más pobres. Que uniera a las personas entre sí y con la naturaleza. Que esta esperanza renazca eternamente más allá de él”, fue el mensaje de Emmanuel Macron, presidente de Francia.
“Su incansable labor por promover un mundo más justo para todos dejará un legado perdurable, expresó por su parte el primer ministro de Gran Bretaña, Keir Starmer, que emitió un comunicado para expresar el dolor que une hoy a “millones de personas alrededor del mundo por la muerte de Su Santidad”.
¿Quién fue Francisco?
El 13 de marzo de 2013, y el mundo conoció a Francisco como el nuevo Papa con un simple saludo. “Buenas noches”, dijo con la gran sencillez que lo caracterizaba, anunciando así un soplo de aire nuevo y revolucionario en el Vaticano. El argentino Jorge Mario Bergoglio tomó las riendas de la Iglesia desde ese mismo día, abriendo las puertas a todos y despreocupándose de esa ala de católicos siempre reacios a las novedades. Lo hizo después del shock que supuso la renuncia de Benedicto XVI, pero fue capaz de pasar página de una manera que era difícil de imaginar.
Jorge Mario Bergoglio nació en Buenos Aires el 17 de diciembre de 1936. Fue hijo de inmigrantes piamonteses: su padre Mario era contador, empleado en los ferrocarriles, mientras que su madre, Regina Sivori, se ocupaba de la casa y de la educación de sus cinco hijos. Después de graduarse como técnico químico, eligió el camino del sacerdocio, ingresando al seminario.
En 1958, Bergoglio entró en el noviciado de la Compañía de Jesús. Así inició una larga vida de servicio a la Iglesia hasta convertirse en cardenal arzobispo de Buenos Aires y desde 2013 en el 266 Pontífice de la Iglesia Católica.
La apertura a los divorciados, a los homosexuales, la valorización de la mujer hasta darle el lugar que durante siglos había estado reservado sólo a los cardenales. Y luego esa Iglesia “en salida”, hacia los más frágiles, desde los migrantes, su primera preocupación, hasta los pobres. Es precisamente pensando en los pobres que elige un nombre que ningún Papa en la historia se había atrevido a elegir: Francisco, como el pobre de Asís, también un revolucionario de su tiempo.
Fuente y fotos: @ansa.it



