A poco tiempo de presentar el proyecto de reforma tributaria al Congreso Nacional, el viceministro de Tributación, Fabián Dominguez, detalló los principales aspectos del proyecto que busca otorgar mayor equidad tributaria e igualar las condiciones de competencia.
El principal aspecto es lograr una redistribución de cargas de manera a completar la “deuda histórica que tenía el sistema tributario con la población paraguaya”, expresó Dominguéz este miércoles en el espacio #PyEn15.
Con la reforma se busca cumplir con el artículo de la Constitución Nacional que establece que la creación y vigencia de impuestos tienen que atender la capacidad contributiva de la población, agregó.
Dentro de la propuesta se otorga potencia a impuestos como el Impuesto a la Renta Personal (IRP) que para asalariados se contemplan tasas progresivas más bajas y se mantiene el techo de 76 millones de guaraníes anuales para ingresar al IRP. En tanto que se requerirá mayor sacrificio fiscal para propietarios y accionistas de empresas, de manera a reflejar la capacidad real del contribuyente.
Fomento a la competitividad e inversiones extranjeras
El otro aspecto principal del proyecto de reforma consiste la simplificación de los impuestos para actividades agropecuarias y del sector comercio y servicios en un mismo impuesto para “unir las reglas”.
Dominguéz explicó que el sector agrícola-pecuario tenía una menor carga tributaria que el sector de comercios y servicios, y con la reforma se propone “igualar la cancha para todos” y fomentar la competencia en igualdad de condiciones.
Además de simplificar el impuesto e igualar la carga tributaria para ambos sectores, también el sector de industria y comercio accederá a las mismas reglas que el sector agrícola en la posibilidad de poder trasladar sus pérdidas fiscales hacia ejercicios anteriores.
Otro punto resaltante consiste en la simplificación del proceso para la inscripción de microemprendimientos dentro del sistema tributario. Estos pequeños comercios tendrán impuestos “en su mínima expresión” que significa un pago aproximado de Gs. 1.000 por cada Gs. 1.000.000 vendidos, señaló Dominguez.
En cuanto a inversiones extranjeras, la reforma propone bajar la carga fiscal para inversiones de este tipo y simplificar los procedimientos, de manera a hacer del país aún más competitivo a nivel regional.